Hola, a continuación hablaré en metáfora:
Había una vez una habichuela que vivía en un país muy bonito y cercano. Pero un día le salió la visa y la habichuela no tuvo más remedio que guardar su vida en una maleta y coger un avión pa otro país, quién sabe si más bonito, pero eso sí, mucho más lejano.
Saltándome sus aventuras en el avión, la búsqueda de sus maletas, el retraso del vuelo, y el hecho de que le tocara sentarse junto a un pallar muy gordo muy gordo... Acontece el día en que la habichuela llega por fin a Barcelona...ups, digamos mejor, la Legumilandia. Y a la semana nomás lo inscriben en una academia pre universitaria.
-Pero si yo ya ingresé a la universidad de mi país-se quejó la habichuela.
-Naranjas. Aquí me postulas de nuevo-sentenció mamá habichuela y ni vuelta que darle.
Usar el metro, ir por la calle en bicicleta, y sin el temor de que le roben a uno, perderse camino a su academia, encontrar el camino, perderse otra vez, llegar tarde al primer día; son cosas que le pasan a uno y a las legumbres también.
Fin de la metáfora.
Me llamo habichuela sin gracia, y quiero escribir en un blog porque ayer se me rompió la guitarra y como no tengo dinero para mandarla a componer, me volveré loco si no me expreso de alguna otra forma, si no encuentro algún medio parecido con el que me puedan decir: "cállate oe" o "sigue así...luego me cuentas" cosas de esas que le dicen a uno.
Saludos.